El reflujo ácido se produce cuando el contenido del estómago eleva el esófago, el tubo que conecta la boca con el estómago y de no tratarse podrías verte en problemas, te cuento por qué.
La mayoría de las personas experimentan un reflujo leve de vez en cuando. El riesgo de complicaciones es generalmente bajo cuando el reflujo es menor.
Este reflujo puede tratarse con algunos medicamentos, entre ellos el kaopectate, que calma la acidez estomacal y brinda calma a tu organismo para evitar el reflujo a mitad de la noche.
Sabemos que cuando te sientes mal lo que menos quieres es salir de casa, es por ello que puedes conseguir kaopectate comprando en línea a través de tu farmacia de confianza, aunque si así lo quieres, puedes comprarlo asistiendo de forma física.
Por el contrario, el reflujo ácido frecuente puede ser un signo de una afección conocida como enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE).
Aunque la ERGE en sí misma no es una afección potencialmente mortal, puede provocar problemas de salud y complicaciones más graves si no se trata.
Lo que hay que saber sobre el reflujo ácido y la ERGE
El reflujo ácido leve u ocasional no suele ser motivo de preocupación. Aunque puede causar molestias temporales, no presenta ningún riesgo importante para la salud.
Las personas que experimentan reflujo ácido más de dos veces a la semana pueden tener ERGE, una afección que se asocia con más síntomas y complicaciones.
Los síntomas comunes de la ERGE incluyen:
- Mal aliento
- Dolor en el pecho
- Tos
- Dificultad para tragar (disfagia)
- Acidez estomacal
- Indigestión
- Náusea
- Regurgitación
- Dolor de garganta
En algunos casos, la ERGE puede provocar complicaciones. Algunos de ellos pueden ser graves, especialmente si no se tratan. Muchas de estas complicaciones están relacionadas entre sí.
Algunos de los problemas de salud que pueden surgir debido a la ERGE.
Esofagitis
El reflujo ácido frecuente puede desencadenar inflamación en el esófago, una afección conocida como esofagitis.
La esofagitis hace que tragar sea difícil y a veces doloroso. Otros síntomas incluyen:
- Dolor de garganta
- Voz ronca
- Acidez estomacal
La esofagitis crónica no tratada puede causar úlceras y estenosis esofágicas. También puede aumentar el riesgo de cáncer de esófago.
Úlceras esofágicas
El ácido estomacal puede dañar el revestimiento del esófago, causando una úlcera dolorosa, este tipo de úlcera péptica se conoce como úlcera esofágica.
Puede causar síntomas como:
- Una sensación de ardor en la zona del pecho
- Indigestión
- Dolor al tragar
- Náusea
- Acidez estomacal
- Heces con sangre
Sin embargo, no todas las personas que tienen una úlcera esofágica tienen síntomas.
Si no se trata, una úlcera esofágica puede provocar complicaciones más graves, como perforación anesofágica (un agujero en el esófago) o una úlcera sangrante.
Neumonía por aspiración
El ácido estomacal que se eleva a la garganta o la boca se puede inhalar en los pulmones. Esto puede provocar neumonía por aspiración, una infección pulmonar que causa síntomas como:
- Fiebre
- Tos profunda
- Dolor en el pecho
- Dificultad para respirar
- Sibilancias
- Fatiga
- Decoloración azul de la piel
- Muerte
La neumonía por aspiración puede llegar a ser grave e incluso mortal si no se trata.
Cómo prevenir las complicaciones del reflujo ácido
Es posible que puedas reducir el reflujo ácido y prevenir complicaciones adoptando los siguientes hábitos:
- Evita ciertos alimentos. Los alimentos grasos, grasos, ácidos y picantes tienen más probabilidades de provocar reflujo. También se sabe que otros alimentos, como la menta, la salsa de tomate, el ajo, las cebollas, los cítricos y el chocolate negro, desencadenan el reflujo.
- Cambia tus hábitos alimenticios. Intenta comer al menos de 2 a 3 horas antes de acostarte o acostarte. Esto le dará tiempo al estómago para digerir los alimentos que has comido. Además, comer porciones más pequeñas y masticar lentamente puede ayudar a prevenir el exceso de reflujo.
- Perder exceso de peso. Llevar el exceso de peso alrededor del medio puede empujar el estómago hacia arriba, lo que facilita que el ácido suba hacia el esófago.
- Limitar el alcohol y la cafeína. Tanto el alcohol como la cafeína pueden aumentar el reflujo ácido.
- Deja de fumar. Fumar hace que sea más difícil para el esfínter que separa el esófago del estómago cerrarse correctamente después de que la comida entre en el estómago.
- Duerme en una pendiente. Si el reflujo y la acidez estomacal golpean por la noche, coloca algunos bloques debajo de la cabecera de su cama para que la parte superior del cuerpo esté ligeramente más alta que su estómago.
- Usa ropa más suelta. Los pantalones ajustados pueden ejercer una presión adicional sobre el abdomen, forzando el contenido del estómago hacia arriba.