Si te interesa cuidar tu salud conoce mucho más sobre las vitaminas que necesita tu cuerpo para estar saludable.
Introducción- Vitaminas
Las vitaminas son muy importantes para las funciones del organismo. “Activan” las enzimas, que a su vez hacen que funcionen todos los procesos químicos del cuerpo.
Necesitamos vitaminas para equilibrar las hormonas, aumentar la energía, mantener y reforzar el sistema inmunitario, mantener la piel y los vasos sanguíneos sanos, ayudar a las funciones cerebrales, al sistema nervioso y a la mayoría de las demás funciones corporales. Algunas vitaminas son antioxidantes: protegen al organismo de las enfermedades cardíacas, el cáncer y la contaminación y ralentizan el proceso de envejecimiento (vitaminas A, C y E). Las vitaminas B y C son necesarias para transformar los alimentos en energía mental y física.
La vitamina D es necesaria para la salud de los huesos, y la vitamina E ayuda a proteger las grasas esenciales para que no se pongan rancias.
Las vitaminas en los alimentos no solían ser un problema cuando la gente vivía directamente de la tierra y tenía muchas frutas y verduras frescas para comer todos los días, pero a medida que más y más gente se traslada a las ciudades y tiene que comprar todos sus alimentos, a menudo no del todo frescos, el contenido de vitaminas se reduce. La costumbre de freír los alimentos a altas temperaturas también destruye las vitaminas, por lo que acabamos comiendo alimentos muy pobres en vitaminas en muchos casos y, como resultado, vemos cada vez más signos de carencia de vitaminas.
El siguiente resumen explica los dos ladrones, es decir, las cosas que destruyen o dificultan las funciones vitamínicas en el cuerpo, y ofrece una breve descripción de algunos de los mejores alimentos que se pueden consumir si se sospecha que hay una carencia. En caso de deficiencias graves, consulte a un médico y/o a un nutricionista certificado.
Vitamina A (Retinol y Betacaroteno)
La vitamina A es necesaria para mantener la piel sana tanto en la superficie del cuerpo como en el interior del tracto digestivo. Es un antioxidante y un refuerzo inmunológico y es necesaria para una óptima visión nocturna.
La vitamina A trabaja con el mineral zinc, y las vitaminas C y E ayudan a protegerlo.
Síntomas de carencia: – Úlceras bucales, mala visión nocturna, acné, piel seca y escamosa, caspa, diarrea.
Robos: El alcohol, el tabaco, el calor, la luz, el café.
Fuentes alimentarias importantes de vitamina A: Hígado, zanahorias, boniatos amarillos, calabazas y calabacines, berros, coles, melón, mango, papaya y otras frutas y verduras amarillas y verdes.
Biotina
La biotina es el octavo nutriente esencial de las vitaminas del complejo B. Es especialmente importante durante la infancia. Ayuda al cuerpo a utilizar las grasas esenciales, contribuyendo a la salud de la piel, el cabello y los nervios. La biotina actúa junto con otras vitaminas del grupo B, el magnesio y el manganeso. Si se sospecha que hay una carencia, lo mejor es complementarla como parte del complejo vitamínico B y junto con los alimentos.
Síntomas de carencia: Piel seca, mal estado del cabello, encanecimiento prematuro, músculos sensibles o doloridos, falta de apetito o náuseas, eczemas o problemas cutáneos.
Robos: Clara de huevo cruda, alimentos fritos.
Mejores fuentes alimentarias de biotina: Huevos, almendras, pescado y marisco, maíz dulce, leche, sandía, tomates, cerezas y otras bayas
rojas y capsulas de biotina.
