Mantener la salud de las articulaciones debería ser un objetivo diario para los atletas. La salud de las articulaciones es un tema complejo para todo el mundo, pero para los atletas supone una preocupación mayor. La tensión constante e intensa que se ejerce sobre las articulaciones debido a la participación en el deporte prepara el terreno para la inflamación de las articulaciones y, en última instancia, para la degeneración.
Una dieta rica en nutrientes es la primera línea de defensa contra la inflamación. Desgraciadamente, los alimentos no son suficientes en nutrientes para curar las estructuras dañadas. Lo que importa en última instancia no es lo que el deportista come, sino la cantidad de nutrientes que entran en el torrente sanguíneo para llegar al tejido objetivo. Sin embargo, la adición necesaria de suplementos se vuelve problemática debido a la abundancia de productos en el mercado que carecen de calidad validada por la investigación. He aquí una lista parcial de mis suplementos favoritos probados por la investigación y la práctica.
Multivitaminas
Un multivitamínico / multimineral debería formar parte de la nutrición básica de un atleta. Deben provenir de una fuente acreditada, lo que significa que deben estar certificados por GMP (Good Manufacturing Practice), NSF (National Sanitation Foundation) o TGA (Therapeutic Goods Administration).
Un multivitamínico / multimineral óptimo tendrá vitamina E, carotenoides, zinc, magnesio, cobre, un complemento completo de vitaminas del grupo B y hidroxiapatita de calcio microcristalino (MCHC) para el componente de calcio. Se ha demostrado que la MCHC no sólo previene la pérdida de masa ósea, sino que también favorece su crecimiento.
Numerosos estudios sobre los ácidos grasos omega-3 indican que mejoran los perfiles cardiovasculares. Dos gramos de EPA-DHA, tomados diariamente, redujeron el dolor en casi el 60 por ciento de los pacientes con dolor de cuello y espalda baja.4-5 El consumo de omega-3 puede disminuir el dolor crónico agudo y la inflamación, un problema grave como resultado del rendimiento deportivo a largo plazo.
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Enzimas proteolíticas
Los estudios sugieren que los pacientes que reciben enzimas proteolíticas experimentan una reducción de la hinchazón, el dolor y la inflamación, así como tasas de recuperación más rápidas tras una lesión. Las enzimas proteolíticas incluyen la tripsina y la cromotripsina, que a menudo se combinan con la bromelina. Los estudios demuestran que el tratamiento con bromelina dio lugar a una clara reducción de la hinchazón, el dolor en reposo, el dolor durante el movimiento y el dolor en las zonas sensibles.
Según mi experiencia, el uso de este suplemento en un plan de tratamiento dentro de las 72 horas siguientes a una lesión deportiva puede conducir a una recuperación más rápida.
Vitamina D
Se trata de una vitamina esencial requerida por el organismo para la correcta absorción del calcio, el desarrollo óseo, el control del crecimiento celular, el funcionamiento neuromuscular, el correcto funcionamiento inmunitario y el alivio de la inflamación. Un estudio realizado descubrió una deficiencia de vitamina D en atletas afroamericanos y en deportistas que sufrían lesiones musculares. Se observó que el 50 por ciento de los atletas analizados tenían niveles consistentes con la deficiencia de vitamina D.
El Dr. Santiago Rodeo, codirector del Servicio de Medicina Deportiva y Hombro del Hospital, señaló que “el cribado y el tratamiento de la insuficiencia de vitamina D en los atletas profesionales puede ser una forma sencilla de ayudar a prevenir las lesiones.” Los resultados del estudio se presentaron en la reunión anual de la Sociedad Ortopédica de Medicina Deportiva.
En un estudio participaron sujetos con deficiencia de vitamina D y dolor lumbar crónico a los que se les administró 5.000 UI y 10.000 UI diariamente. Al cabo de tres meses, los 299 sujetos que se consideraban deficientes en vitamina D de antemano habían informado de la desaparición de su dolor de espalda. El estudio también demostró que 341 de los 360 sujetos vieron aliviado su dolor lumbar crónico con este régimen de suplementos de vitamina D.
Se ha demostrado que un aumento de la ingesta de vitamina D en los deportistas disminuye el riesgo de fracturas por estrés, de las que corren un mayor riesgo que la población general.
Glucosamina y condroitina
La glucosamina y la condroitina estimulan la formación y reparación del cartílago articular. También se ha demostrado que reducen el dolor y la inflamación, y ralentizan la pérdida de cartílago. Un ensayo cruzado de 16 semanas, doble ciego y controlado con placebo, de una combinación de 1.500 mg al día de glucosamina HCI y 1.200 mg al día de condroitina sulfato demostró que la combinación aliviaba los síntomas comunes de la osteoartritis de rodilla.
